Reunión de consorcio
Me despierto... Olor a Jazmín en el aire, me pongo mis hermosas pantuflas de terciopelo con cara de Pitufo que me regalo mi abuela Nilda y pongo agüita en la pava para tomar unos mates mañaneros. Me sentía fresco. En realidad el aroma a Jazmín eran las tostadas que se estaban quemando. Igual en mi revoloteaba ese sentimiento de primavera y eso que hacía 42 grados y no me anda el aire desde el verano pasado. Entonces pienso (si gente, yo PIENSO ¬¬) que buen momento para sentarme a escribir alguna historia “firibulera”. Me siento muy cómodamente en mi silla, apoyo la espalda, estiro los dedos, luego hago unos masajes pre-escrtiura, relajo el cuello, preparo el maté, tomo un lápiz y comienzo a escribir con mucha alegría (los pajaritos cantaban de fondo).
TOC TOC TOC!!
Alguién interrumpía golpeando la puerta de mi hogar. Me doy vuelta y pasan un sobrecito por debajo de la puerta de mi Depto. Para los que no lo saben yo vivo en el 4to “B”. Abro el sobre y miro la carta!! Reunión de consorcio!!
LA PUCHA!!!!!
Si hay algo complicado en mi edificio son las reuniones de consorcios!! Un programa de chimentos les juro que es menos DANGER ZONE. La verdad que es un disgusto ir, siempre trato de esquivarlas pero es imposible. Faltar, te mete en más bolonquis. Siempre pasa lo mismo, puteadas que se lanzan desde un rincón de la sala a la otra, luego a medida que se caldea el clima, comienzan a volar sillas, sillones, cuadros, cuchillos, libros y todo tipo de elementos contundentes para finalmente terminar a los tiros y peleas de navajas a lo gitano. Normalmente se arman dos equipos y hacemos un guerra de tirar la soga. Hasta que uno suelta a los rotwailler, termina viniendo la policía a puros balasos de goma y bombas lacrimógenas, se va todo al carajo, saltan la térmica en todo el edificio y se da por finalizada la reunión hasta el próximo mes.
Es así. En mi edificio se vive en un constante clima hostil, se respira violencia, las guerras son constantes y cada año en vez de mejorar la relación Vecino – Vecino empeora a pasos agigantados como los que daría un gigante (?).
Si el comité olímpico decide que “putearse con el vecino es un deporte”, estoy casi seguro que nos merecemos una medalla de oro, y si no nos las quieren dar (en el deporte está todo arreglado)por lo menos nos dejarían subirnos al podio, lo tenemos más que ganado.
Obviamente todo esto no me enorgullece ni mucho menos, pero bueno les voy a contar ciertos recaudos que hay que tener antes de ir a una reunión de consorcio en mi edificio.
Recaudos:
1- Usar casco. Si usted no quiere terminar con un paraguas de sombrero, o un destornillado de piercing cerebral le recomiendo llevar casco. Todos lo usamos. Es como el si bebió no maneje, si no quiere tener hijos tenga sexo por internet o si juega al bowling trate de no tener pegamento en sus dedos y ese tipo de consejos útiles que nunca están de más.
2- Llevar picana eléctrica y ante la duda corra. Cuando la cosa se pone áspera no hay nada mejor que electrocutar a los oponentes. También recomiendo llevar pimienta para los ojos y alcohol en gel para el dengue, cualquier sucio truco sirve. Lo importante del escapista es escaparse. Soldado que huye sirve para otra reunión de consorcio. A caballo regalado no se le caen los dientes. Eso me lo dijo mi dentista.
3- Aprender artes marciales. Boxeo, Tai chi chuan, Karate, Kick Boxing, Bolas Golping, Traición Highttter Punch, Revoleiting de Boleadora, Patading en los Huevines. Todo método de agresión o defensa personal sirve así que aprenda rápido alguno de estas técnicas. Sería muy triste terminar muriendo a bastonazos en manos de la vieja del 1ero “B”. También mirar cualquier peli de Bruce Lee e imitar sus movimientos es una buena forma de empezar en el arte del matar.
4- Recuerde que el dialogo no sirve para nada. En estas ocasiones lo único que vale es la fuerza bruta, ser lo más grandote posible o tener la mayor cantidad de armas. El sistema democrático en mi consorcio no existe, como tampoco lo existe en gran parte del mundo. Las decisiones son tomadas por el último que queda en pie. Solo con violencia se logra el triunfo, parece muy primitiva la idea pero no queda otra, que marcar territorio (como los perros) y hacer tranzas con sujetos indeseables con tal de exprimir el mayor beneficio para nosotros.
5- No opine mucho. Muy probablemente le cortarán la lengua si hablo mucho. Acá no se anda con jodas. No se haga el gracioso que para gracioso están los circos. El último gracioso cayó de “FORMA ACCIDENTAL” desde la terraza tres veces y luego lo piso un camión de remolque. La policía encontró muy razonable la historia.
6- Coma más verduras. No se que tanto sirve para la reunión de consorcio pero una dieta balanceada nunca esta de más.
En definitiva “un garrón” esto de la reunión de consorcio. Pero bueno es así, siempre me tengo que poner mi mejor chaleco antibala y un buen moño rojo, y prepararme para otra bonita reunión. No importa que usted no opine ni diga nada malo, uno termina golpeado por inercia. Son como esas piezas del domino, que nadie se salva de caer. Es triste pero es así!!
Analizando a mis vecinos:
Planta Baja: El portero.
Tipo jodidos como el portero pocos hay, el flaco es tu mayor enemigo. Es monosílabo, solo reproduce gruñidos variados como ARG, ERGH o HIPRARERGH. Supuestamente a él le pagamos para trabajar para nosotros, pero lo único que hace es causarnos problemas. Si le pedís la hora te la da mal apropósito, te esconde el correo importante y le gusta decir que el ascensor no anda para disfrutar viendo como subís la escalera. Nos corre por todos lados con el reglamento del edificio, diciéndonos cuantas infracciones supuestamente hicimos. Un amargado total el tipo. Vive de las prostitutas y la ginebra, pero más de la ginebra que de las prostitutas. Encima se hace el sordo. Pero uno lo aprende a querer (si te comparte ginebra, obvio).
Primero “A”: El boxeador
Dicen que este flaco estuvo preso en Coronda. Dicen que ni el Tosca se le planto porque repartía buenos golpes. Tirabas buenos cross, unos cruzados espectaculares y metía buenos ganchos. En su carrera profesional tuvo 12 peleas ganadas, 7 por nocaut, 2 empates y 8 derrotas. En su carrera en el edificio tuvo 8 peleas ganadas con los vecinos y todas por nocaut. Boxeador frustrado, bastante grandote pero con panza cervecera bien marcada. Alcohólico y no justamente anónimo, amante de las armas de fuego. Duerme con su arma debajo de la cama pero dice usarla de forma responsable, diciendo que sola mata gente que no vale la pena. Lleva como filosofía de vida “el gatillo fácil”. Su última novia la consiguió a punta de pistola. Y dice que las cosas en el super “las paga” a punta de pistola. El flaco encima se hace el pistola. La última vez que alguien se metió con él, termino como un acordeón y se lo regalo a un músico reconocido. Campeón mundial de romper huesos en pulseadas. Siempre que nos juntamos a jugar al Poker si gana se lleva toda la plata y si pierde también porque saca el arma y empieza a repartir balasos al techo. Su lema es: “Para qué pedir tanto por favor si existe el a punta de pistola”.
Primero “B”: La vieja
Una viejita, jubilada. Era maestra de “canto lírico” en una escuela secundaria de mala muerte en un barrio que dejo de existir después de que un volcán hizo erupción en Roldán. Es chueca y usa un bastón. Tiene un carácter espantoso, y no sabe hablar sin decir insultos. La dieron por muerta varias veces, pero la vieja es inmortal, ya van cuatros funerales que se despierta en el ataúd y los tienen que suspender. Le gusta mascar coca, tiene 8 gatos bautizados con los nombres de las vedettes que aparecen en el programa del perverso Marcelo Tinelli. Sus gatos son verdaderos felinos a los que conviene por si acaso ni mirar. Siempre se queja de los ruidos por más que no escucha un carajo y se la pasa predicando el fin del mundo.
Segundo “A”: El metrosexual
No sale si no se depila, te crítica constantemente como te vestiste, que los cordones no te hacen juego con el pelo, que la barba esa es desprolija, que tenes las orejas sucias, que seguro que tenes pelusas en el pupo, que no te pusiste la cantidad adecuada de perfume, entre otros detalles que solo él nota. Impecable la verdad, hace gym, va a clases de Yoga, Yoga Rítimico, Yoga con bolas, Yoda de Star Wars, Ensalada de Yoda entre otras cosas. Corre 10 km diarios, trabaja, ayuda a ancianas a cruzar la calle, para autos con las manos, exitoso, usa porcelanas en los dientes, sonríe todo el tiempo, se hace máscara de pepinos, onda ultrasónicas en la cola, etc. Se siente el rey del mundo, pasa 14 horas diarias frente al espejo arreglándose, para que cada pequeño filamento de su cabello esté justo a 45 grados como a él le gusta. Hace tratamientos liposuccionales para sacar cada excedente de grasa. No tiene barritos, ni nada, se depila cada parte de su cuerpo dos veces al día, se baña en finas hiervas, práctica sonrisas y se viste solo con ropa de marca (la marca del zorro). Por donde camina deja su auriola a perfume imposible de no distinguir. Su tema preferido para hablar es de él mismo.
Segundo “B”: El Jevi
El jevi es un caso especial, atormenta a casi todo el edificio con su música a todo lo que da. Normalmente cuando se sienten movimientos sísmicos, es que este muchacho llego a casa. Recibe constantemente puteadas, pero al Jevi no le importa porque es JEVI. Se quejan de que sale un olor desagradable, de que no se baña, de que no limpia, pero al Jevi no le importa. Él solo ahuyenta a la gente al grito de AHHHHHHHH!!! Destapa cervezas con los dientes, le come la cabeza a murciélagos vivos, escupe fuego, grita, revolea los pelos. Dicen que en su cabello viven personas que quedaron atrapada hace años. Toca en una banda Jevi los fines de semanas y los demás días atiende una guardería para niños en un Yoping reconocido de la ciudad. Solo bebé cerveza, desconecto las cañerías de su casa y la conecto a un tonel de chop que diariamente le traen tal cual un sodero trae sifones. A la primera que le decís seguro te agita un cadenaso en el ojo. Ojo con el jevi, es un tipo duro.
Tercero “A”: La vecinita
Cuando no hay planes un sábado, un domingo, un lunes, un martes, un miércoles, un Júpiter, un jueves o un viernes, o un sábado de nuevo. La mayoría de los vecinos se encuentran con la vecinita, la vecinita es como decirlo, una mujer salvaje pero del siglo XXI que goza de lo que hace, ninfómana como ella sola y muy peligrosa. Vive de una pensión de su esposo muerto. Es dulce, y habla con mucha inocencia, pero sus fines no son tan inocentes. Le gusta jugar al dominó y es botinera de equipos de la D “metropolitana” regional. Ama los chistes de gallegos y el aroma a fritura recién hecha. Suele comer en Mc Donald pero prefiere Buger King.
Tecero “B”: El filósofo
Estudió filosofía durante doce años pero nunca se recibió. Hoy en día sigue con sus estudios y maneja un taxi. Canta canciones de Arjona y es imitador de Sandro. Le gusta la pizza de Fugazza, y hace filosofía barata, pero de la PIOR. Escribió muchos libros que fueron rechazados por tanta editorial en las que los presento. Actualmente, a falta de papel de diario sus amigos usan sus escritos para hacer los asados del sábado a la noche. Existencialista como él solo. Piensa que "el ser" no es más que un individuo en un edificio que busca irse a vivir a una casa con patio. Es clavadista oficial a pileta pelopincho. Le gusta el arroz con pollo que hace su mamá y a su mamá le gusta el carnicero que le vende el pollo. El carnicero se abstuvo a revelar sus gustos.
Cuarto “A”: La bipolar.
Un día te saluda, al otro te escupe. Un día te cocina, al otro te tira la cacerola por la cabeza. Un día te invita a cenar, al otro te patea cuando te asomaste al balcón. Un día te dice “Hola, qué tal??”, al otro “Hola, por qué no te matás??” Esa es la bipolar, la más dulce por momentos, y la más agresiva de todo el edificio al mismo tiempo. Uno la quiere a la mitad. Se recibió de Licenciada en la Contradicción y da clases de cambiar de opinión. Por más que sabe que necesita tratamiento psiquiátrico, su otra mitad piensa que no. Cada vez que se interna, al otro día se escapa. Es una historia de nunca acabar. Por momentos te habla con dulzura, como si estuvieras casi en una fábrica de azúcar y en otros te habla escupiendo e irradiando odio. Baila danza clásica pero no le gusta. Es de river pero también de boca.
Cuarto “B”: Yo
Esa es mi casa. HOME SWEET HOME
Quinto: El proteccionista
El quinto en el edificio, es el último piso antes de la terraza. En este habita un personaje muy especial, un proteccionista de animales. Animal que ve en la calle, animal que se lo lleva a vivir a su casa. Su departamento es un verdadero zoológico sin rejas. Perros, gatos, alacranes, roedores, lagartijas, iguanas, carpinchos, elefantes y jirafas entre otros conviven sin ningún problema. Algunos me dirán digno del Staff de Firibule. Si, es verdad. El proteccionista es un caso atípico, un flaco que vive por los animales, no se sabe mucho de su historia personal. Algunas teorías dicen que tiene una plantación ilegal de marihuana, armas químicas o que está entrenando un ejército de monos para dominar el mundo. El resto lo ve como un simpático personaje amante de los animales.
Terraza: Alguien.
En la terraza hace años que vive alguien, nadie sabe cómo se llama ni nada. Desde que una noche alguien dejo la puerta abierta por error, entró y vive allí. Algunos creen que es un mito, que en realidad no hay nadie en la terraza y que él del quinto creó el mito para esconder su plantación ilegal de frutillas silvestres. L a verdad no la sabremos nunca. Nadie tiene los cojones para subir a la terraza!!
Bueno eso son todos mis vecinos del edificio. Para más información comuníquense conmigo vía Handy.
Todo esto fue ficción con sabor a realidad amarga. Saludos y más allá de que la odien o no:
FELIZ NAVIDAD GENTE!!